Hemos visto a lo largo de los distintos artículos de este blog que la industria tiene una estética que atrapa la atención visual, han sido muchos los fotógrafos que han buscado esa estética en su obra, en esta ocasión hablamos de la estética de los espacios naturales afectados por la actividad industrial.

Edward Burtynsky, fotógrafo canadiense que utiliza la cámara de gran formato con tomas desde puntos de vista elevados, esto hace que su fotografía sea pensada y pausada y que obtenga la máxima profundidad de campo en sus tomas. Además el autor no escatima en medios a la hora de acceder a los puntos de vista más fotogénicos.

Las fotografías de Burtynsky son maravillosas vistas de paisajes alterados por la industria, trata de plasmar los efectos de la actividad industrial en la naturaleza con vistas casi apocalípticas.

Normalmente los fotógrafos se dedican a una disciplina fotográfica concreta, hay fotógrafos de paisaje, fotógrafos de moda, fotoperiodistas, fotógrafos de naturaleza… y no siempre es fácil que nos sepan decir porque han elegido ese camino, es como un tipo de epifanía.

En el caso de Burtynsky dos fueron los motivos que lo llevaron a este tipo de fotografía:

1 – Admiración por la fotografía de paisaje de gran formato, con autores como Edward Weston o Ansel Adams de los que hablamos en este blog, en su época de estudiante él era un ferviente admirador de este tipo de fotografía y empezó haciendo  esto hasta que uno de sus profesores le indicó que incluyese la evidencia de la mano del hombre en esas fotografías.

2 – En una ocasión, viajando por Pennsylvania, en Frankville encontró un paisaje de minería que lo dejó profundamente impactado.

En su aspecto vital cabe destacar una visita que con 7 años hizo a una planta de fundición de la General Motors, enormes prensas y forjas en la luz mugrienta, brillantes metales fundidos que ser vertían para formar los bloques de los motores, trabajadores moviéndose lentamente en su trajes anticalóricos de color plateado, para Edward fue algo así como una visita al infierno.

Fue allí también donde su padre trabajó la mayor parte de su vida y por culpa de la que probablemente murió, después de trabajar durante años con con PCBs, productos que fueron matando de cáncer a los trabajadores uno a uno, entre ellos al padre de Edward a los 46 años.

Por todo esto su obra vital está basada en la temática que hablábamos, por tanto no mostraremos un trabajo concreto, que sería suficiente para ilustrar la relación de su fotografía con la industria sino que mostraremos imágenes de distintos trabajos para que se vea su recorrido fotográfico.

Proyecto Shipbreaking, sobre los desguaces de barcos en Bangladesh y la India, la idea surgió de la necesidad de desguazar las embarcaciones de simple casco tras el desastre del Exxon Valdez, que motivó que se exigiese a las compañías de seguros que no cubriesen ese tipo de barcos a partir del 2004 y que por tanto los armadores estuviesen obligados a desguazarlos, lo cual se hizo en su mayor parte en estos países de mano de obra barata y exigencias ambientales más laxas.

Proyecto Oil, hace un recorrido completo por la industria del petróleo y del motor, desde la extracción, hasta la fabricación y la utilización y ocio que se hace de él. De alguna manera ver el ciclo completo permite que el espectador pueda sentir que parte de la responsabilidad de lo que ocurre en el medio ambiente es también suya y que se sensibilice en ese sentido. Como Burtynsky dice, el coche que nos proporciona libertad y a la vez cambia el mundo de forma dramática.

Proyecto China, donde habla del como la globalización ha llevado a que la producción se haya llevado a países como China, desde astilleros, hasta electrónica se produce allí con costes y leyes mucho más apropiadas para obtener un bajo coste de producción, facilitando así el abaratamiento de los bienes de consumo, aumentando el consumo de los recursos naturales y por tanto la generación de residuos.